La crisis en el sector inmobiliario ha provocado que los ciudadanos tengamos que vender nuestras viviendas por un precio inferior al de su adquisición, es decir, no hay un incremento del valor en el momento de la transmisión.
A pesar de no existir una riqueza imponible, el Ayuntamiento de Campello gira la liquidación para el pago de la plusvalía municipal, lo que significa que se está gravando por "un hecho imponible ficticio", prohibido por la Constitución Española en el artículo 31.
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